Este ha sido un fin de semana muy especial. Al haber tantos días festivos el equipo quedaba un poco bajo mínimos y nos asustaba un poco.  Sin embargo los papás hicieron un esfuerzo y se quedaron para que se pudiese jugar el partido del sábado. Un partido con mucha calidad deportiva y con injusto resultado. Ahí nos dan la sorpresa de que también tenemos que jugar el domingo. !Menudo susto!

Ahora sí que no hay solución. No tenemos jugadores suficientes. Pero sí la había. Recurrimos a nuestros jugadores prebenjamines para que nos echaran una mano. Y por supuesto no nos defraudaron. No sólo aceptaron el desafío sino que lo hicieron muy bien. Gracias a Adrián y a Pedro formamos equipo, y todos juntos, mayores y pequeños, conseguimos vencer al rival.

 

 

Grandes y pequeños consiguieron el triunfo

El banquillo concentrándose para el juego



Calentando para ganar